Google, el gigante de internet, nos ha ofrecido infinidad de servicios para simplificar nuestras tareas en la red. Servicios que van desde un correo electrónico hasta el almacenamiento de nuestras fotos o documentos.
Uno de estos servicios gratuitos es Google Drive, que nos permite almacenar y acceder o crear documentos, hojas de cálculo, presentaciones y más, nos permite de forma segura, abrirlos o editarlos desde cualquier dispositivo, y esto se debe a que cuenta con almacenamiento en la nube. Al momento de utilizar el almacenamiento en la nube, son guardados de forma segura en los centros de datos de primer nivel de Google. Los datos se encriptan en tránsito y reposo, y si se elige acceder a estos archivos sin conexión, se almacena la información en el dispositivo. Sin embargo, si estos archivos se quedan inactivos en el servicio durante más de dos años (24 meses), Google puede borrar el contenido que se tenga almacenado en ese servicio. Y, si sobrepasamos nuestro límite de almacenamiento durante dos años, Google puede borrar todo lo que tengamos en Gmail, Drive y Fotos.
Pero todo empezó el año anterior, que Google dio un aviso a los usuarios de Google Drive que, debido a una nueva modificación y a las constantes actualizaciones de los sistemas operativos, Google Drive ya no ofrecerá sus funciones.