Ciberdelincuentes usan esta forma para recopilar ilegalmente datos financieros de sus víctimas. (Fotocomposición: Getty Images/Unplash)
En el amplio mundo digital de la actualidad, cada avance tecnológico trae consigo ciertos riesgos a considerar. Si bien brindan una comodidad sin precedentes, también exponen a los usuarios a nuevas formas de fraude y robo. Uno de los recientes métodos que han surgido en este oscuro mundo cibernético es el uso fraudulento de los códigos QR.
A simple vista, estos pequeños cuadros de patrones parecen inofensivos, incluso útiles, facilitando transacciones sin contacto y simplificando los pagos.